¿Puede haber algo bueno en el sufrimiento?
La lectura de su ¿Puede haber algo bueno en el sufrimiento? que, con gesto de amistosa confianza, ha puesto en mis manos, me ha suscitado no pocas resonancias.
Ante todo, me ha hecho recordar, una vez más, que podemos considerar el cristianismo como una prolongada y constante reflexión acerca del sufrimiento y de la muerte, que es su extrema manifestación. Obviamente, no es éste el único modo de acercarnos y de “ver” nuestro “Credo”, pero no cabe duda de que el drama del dolor, del sufrimiento y de la muerte constituyen como el centro de convergencia hacia el cual todo está orientado.