Reseña

La industria del plástico a través de la historia de la humanidad se ha sido clave en el desarrollo económico y social, esto debido a su versatilidad y variabilidad en soluciones, sus bajos costos de producción, así como su disponibilidad. Este material es omnipresente en la economía moderna y ha permitido el desarrollo de productos innovadores en la Construcción, el transporte, la electrónica y la medicina, entre otros sectores. Adicionalmente, el plástico ha transformado y facilitado la forma en la cual los productos llegan a los consumidores finales.
Sin embargo, el material también presenta altos costos ambientales y sociales, principalmente derivados de su difícil degradación y su masiva utilización en aplicaciones de corta vida útil asociado a su producción bajo modelo economía lineal.
Es por ello, que es relevante entender el desarrollo de la industria plástica en Costa Rica, la evolución del consumo del material enfocado en la importación de resinas y material primario, y comprender sus principales aplicaciones dentro de los diversos sectores presentes en el país y su contribución al sector económico.
Otro aspecto relevante es el volumen de residuos plásticos generados en el país y sus mecanismos de gestión. A nivel global la generación de residuos plásticos se incrementó más del doble, pasando de 156 millones de toneladas anuales en el año 2000 a 353 millones en 2019 y se proyecta que para el año 2060 casi se triplique llegando hasta 1 014 millones de toneladas (OECD 2022). A pesar de ello, solo el 9% del plástico fue reciclado en el 2019 y se estima que para el año 2060 esta cifra llegará apenas al 17%.
En Costa Rica, se estima que se generaron 229 612 toneladas de residuos plásticos a nivel doméstico, en 2022, lo que equivale a un promedio de 39 kg por persona al año. Aunque el 93 % de esta cantidad fue recolectada (212 000 toneladas), solo 28 000 toneladas se reciclaron (MINSA, 2023), situando al país entre las naciones de la OCDE con las tasas de recuperación más bajas (OECD 2023). Se estima que, del total de 229 000 toneladas de residuos plásticos, 255 toneladas se dispusieron directamente en medios acuáticos y 37 000 toneladas afectaron ecosistemas terrestres. Además, 13 000 toneladas de residuos plásticos fueron quemadas a cielo abierto, generando contaminación atmosférica y emisiones de gases de efecto invernadero. La ineficiente gestión de los residuos plásticos recolectados, sumada a las 17 000 toneladas que no fueron recolectadas y que generalmente son dispuestas ilegalmente de manera directa en el ambiente natural, sumado se deben considerar otros residuos plásticos asociados a sectores como la construcción, sector automotriz, área agroindustrial, y otros que representa retos importantes para el país a nivel de generación de estrategias de gestión y valorización de los residuos plásticos.