Reseña

Conozco a Vilma. Sé que no es una persona religiosa, es creyente y ciertamente sigue las tradiciones judías de los miembros de su comunidad. Al organizar el trayecto, creo yo, así lo interpreto, escogió la ciudad de Tui para iniciar el trayecto.
Para quienes no creemos en las casualidades, este inicio de la romería, en Tui, ciudad muy cercana a Portugal, Vilma se topó con la Santa Inquisición. Halló los sambenitos, con los que eran castigados los judíos en épocas pasadas. Aunque ella no sea una mujer religiosa, el universo la puso enfrente de la historia de su pueblo, pueblo perseguido en muy diversos estadios y momentos de la historia de Occidente.
Resulta que Vilma descubre lo que ante nuestra vista representa una sanción o un castigo. Hemos de recordar que para los Católicos, los reyes Fernando e Isabel, los judíos y árabes pertenecían a la religión equivocada, de ahí el castigo, los sambenitos, las conversiones forzadas y demás castigos para quienes fueran renuentes a convertirse a la religión verdadera.
El Tribunal del Santo Oficio o La Santa Inquisición tuvo mucho peso en la España católica a partir de 1478. Se extendió por toda la península ibérica y tuvo una gran presencia en los territorios conquistados de la América española.