Bajo la luz de la candela
Hay diversas formas de rendir homenaje a las personas con las que de alguna manera se ha convivido, o de las que al menos se han escuchado historias que han sido inspiración. Escribir sobre ellas, garabateando y divagando entre historias que mezclan realidad y fantasía, llena de regocijo el propio corazón del escritor. Bajo la luz de la candela se basa en hechos reales, o que pudieron serlo, tan solo ligeramente modificados en cuanto a color e intensidad por la imaginación del autor. Independiente de la trama de cada historia o relato, emergen desde la penumbra con mayor o menor ímpetu las más variadas emociones y sentimientos humanos.
Con esta obra el autor rememora algunos momentos de su propia infancia, para convertirlos en narración atrevida que se apropia del sentimiento de los protagonistas.
Un conglomerado de elementos folclóricos y mágicos dan un acabado inquietante a las narraciones. Aunque por doquier se respira angustia, dolor y maldad, también, entre líneas, aparecen el coraje, la valentía y la
esperanza como luz que alumbra en la distancia y que anima a seguir construyendo un destino que, inevitablemente, lleva a la muerte.